(II) Mi pobre corazón, todo lo bueno vivido...(Gatos Pardos)

Hace poco he recibido un e-mail de una amiga a la que le tengo mucho cariño, aunque la vida nos ha llevado por caminos distintos y no nos vemos casi nunca. Me ha dicho que se casa el año que viene. Más le vale invitarme o se queda sin regalo.

Me alegro un montón por ella, pero parece que estoy en medio de una epidemia. No se si recordareis que hace un mes más o menos estuve por ahí una noche con una compañera de colegio a la que tampoco veía desde hace un montón de tiempo.
Al menos media hora de lo que hablamos siguió este esquema:

-Candela: ¿te acuerdad de Paloma? (pone cara de “no veas lo que te voy a contar”)

-Barbas (yo): Si ¿que tal le va? (ceja enarcada, oliéndome el percal)

Candela - Se casó el año pasado.


Así aproximadamente el 70% de mis compañeros de clase. WOW, en solo un momento me sentí viejo, se me pasó al rato con dos gin tonics.


Parece que la gente de mi generación tiene muy mal concepto de la soltería.

Actualmente, sólo entiendo el matrimonio como una manera de evadir ciertos impuestos, la sociedad ha cambiado mucho y ya no se mira mal a las personas que permanecen solteras (afortunadamente para mi y un montón de post-grunges españoles)

La verdad, para mi el matrimonio es el requisito básico del divorcio. Las parejas que se quieren siempre existen, pero son tan pocas que es más fácil encontrar la proverbial aguja en un pajar, creo que es mejor no tener firmado nada que sospeches que vas a romper en un momento de tu vida.

Por supuesto esta es mi opinión, creo que afino bastante, pero me puedo equivocar según el caso. Espero que con la gente a la que aprecio, me equivoque de pleno y sean felices así el resto de sus vidas, si es eso lo que quieren.

Mientras tanto y hasta que nadie me convenza de lo contrario, yo seguiré siendo un gato pardo, de los que salen de noche a confundirse entre las sombras, que no me va nada mal por ahora.

Un saludo!