domingo, abril 26, 2009

Francotirador (II)

Johnny estaba hambriento así que dejó de fingir que dormía. Anoche los chicos y el habían capturado a un carroñero solitario. Un imbécil que se aventuró demasiado en el interior de las ruinas. Cada vez se encontraban con más de estos desesperados a medida que los recursos que saquear se iban agotando en las afueras.

Eran buenos tiempos, gracias al flujo constante de imbéciles que les llegaba, desde hacía meses Johnny podía comer casi todos los días y con el estómago lleno, todo el mundo en la banda estaba mucho más contento y se evitaban las peleas.

Se levantó cuidadosamente, procurando no hacer ruido. Aún quedaba bastante carne y planeaba dar un par de bocados disimulados antes de que se despertasen los demás. Caminó un par de pasos hacia la carretilla de construcción donde estaban los restos del carroñero. El olor de la sangre seca y la carne cruda le hizo empezar a salivar.

Un segundo después, un estallido de sangre surgió de su cabeza. cayó al suelo, ni tan siquiera notó que le habían matado.



Sniper retiró la vista de la mirilla. Aprovechando que los feos se habían quedado dormidos al amanecer se había acercado unas docenas de metros durante los últimos minutos de oscuridad. En una carrera contrarreloj contra el alba quiso llegar al campamento de los mutantes antes de que se levantaran, pero uno de los engendros se había despertado de improvisto así que asumió una nueva posición de tiro y le había abatido disparándole en la cabeza, justo en una extraña masa de carne tentaculada que cubría toda la parte trasera del cráneo del ser.

Se colgó el rifle al hombro y caminó lentamente hacia el resto de feos, que dormían directamente sobre el suelo. Eran cuatro, todos ellos embadurnados en al sangre de su víctima. Preparó su hacha y los decapitó uno a uno sin más ceremonia. La culpa por no haber podido salvar al tipo ayer se mitigó algo con la venganza, pero seguía sin sentirse bien. Al principio pensaba que con el tiempo la sociedad se recuperaría, pero hacía ya 10 años del Pánico y las cosas sólo habían ido a peor, aparecían cada vez más mutantes e incluso la gente no afectada por el virus se había vuelto más miserable y violenta, dispuestas a matarse por los recursos del viejo mundo.





Apartó esos pensamientos de su mente, puesto que el pesimismo no le serviría en su misión. Debía ayudar a la comunidad. Un pequeño punto de luz en las tinieblas de esta era. Se forzó a si mismo a registrar los restos de los mutantes y el carroñero. Encontró una mochila, una escopeta rota y que tuvo que descartar y algo de munición para esta que si conservó. También encontró algo más útil. Un mapa con anotaciones, revisándolo pensó que podría servir para encontrar la zona de donde provenía el carroñero, así que lo guardó.

Escuchó un ruido, eran pasos acelerados que venía de su izquierda, alguien había estado oculto tras un montón de escombros todo este tiempo. Casi no consigue evitar que un feo que no había visto antes le agarrara, la criatura quedó a sus espalda y pudo sentir como le araña con sus zarpas. Se giró y le lanzó un puñetazo con todas sus fuerzas, derribando al ser. Antes de que el mutante pudiera levantarse le puso el pie en el pecho, cogió su hacha y lo levantó para acabar con la criatura.

Pero dudó, pese a las mutaciones, que la había convertido en un ser con garras, colmillos y ojos de serpiente, un engendro con escamas que siseaba y clavaba sus uñas en su bota militar, aquel feo era a todas luces una muchacha de no más de 20 años, seguramente una niña cuando empezó a cambiar. Como Kerrie había sido...

El dolor de las zarpas de la chica en su espinilla le devolvió al mundo. el hacha descendió y silenció los gritos de la mutante. Sniper se alejó rápido, esperando no encontrarse con más feos atraídos por el escándalo de la pelea. Encontró un punto fácilmente defendible y se sentó en el, hundiendo la cabeza entre las rodillas por unos minutos, sin poder quitarse los gritos de aquella desgraciada de la cabeza.

4 comentarios:

Chiqui dijo...

Siii...sangre y visceras joder!!!

Besitos,

*Chiqui*


PD: Give me your brain, tio

Milton Castro dijo...

Esto es genial, tiene mucho potencial.

J.J.Madueño dijo...

siiiiiiiii que bueno pero yo quiero que continue la historia de ROOOOOOCK

Sr. Calavera dijo...

Es verdad, Sr. madueño, voy con retraso, procuraré ponerme al día.